Este ramo reúne la fuerza y calidez de los girasoles, símbolo de luz, energía y optimismo, con la intensidad emocional de las rosas rojas, emblema eterno del amor y la pasión. Acompañados de gypsophilas blancas y un toque de follaje, cada flor contrasta y complementa a la otra en una armonía perfecta.
El papel amarillo que lo envuelve resalta aún más la vitalidad de este diseño, convirtiéndolo en el regalo ideal para celebrar el amor con alegría, agradecer con fuerza o simplemente para decir:
“Eres mi sol y mi todo.”